miércoles, 23 de enero de 2008

treinta y seis horas.

De: 70 kilos 257 gramos
Enviado: martes, 22 de enero de 2008 23:52:30

Y contando. He decidido que el hachís me aliena, así como la televisión... me gustan, me alienan y les he dedicado demasiado tiempo, por ello los aparto con un suave y riguroso gesto. No reniego de nada de ello, pero he de emplearlo cuando me encuentre fuerte en primera persona. Valor Valor para admitirse, aceptarse, administrarse dentro de la cordura ( llamarme enloquecido, putas nadie nace loco, Violadores del verso, Vivir para contarlo). Así que comienzo a contar el tiempo, como gotas de agua que con un continuado puic- puic cada una tiene su importancia, cada gota me recuerda que me voy alejando de mis carencias. Crezco a cada minuto, como buen mamífero racional. Por ello, es posible - espero que no- que detectes un cambio en mi actitud vital. Digo que espero que no sea así, pues lo contrario sería darle un valor a lo politóxico que nunca ha tenido. Cambio de chip, cambio de historia. Ahora he deseado a la madre buenas noches, ella me ha reprochado no haberme acompañado al hospital, ella no comprende que me gusta ir a determinados sitios solito, que me gusta observar y que no necesito su apoyo, el apoyo de nadie ante algo tan nimio como la extracción de muela. Así ha sido. Me ha colmado de medicaciones y me he acordado de David, el niño grande del Viriato, que estuvo a punto de palmarla por una infección bucal. Haré caso a la madre, haré caso al galeno. Salud, caprichosa circunstancia de la vida, salud chorrito de energía que en algún momento te abandona. Son las veintitrés y treinta y nueve y desconozco que hago aquí, escuchando el suave sonido de las teclas del book, escuchando el continuado sonido del ventilador del pc, no hay nada mas. Si, hay algo más, la conciencia, sonoramente silenciosa retumba en mi interior, no es fácil ser justo cuando eres egoísta. Hay que encontrar el puto equilibrio, como siempre. Hoy me llamaron de un curro que no me hace ilusión pero me dará de comer, he decidido ir a ver que coño pretenden de mi, he decidido entrar en dicha dinámica. He trabajado de todo en la vida, he sido chófer, segurata, administrativo y hasta mamporrero de mi mismo ( te animo a que busques el significado de dicha palabra). Mañana, dentro de unos minutos empieza el miércoles, me reencontraré con Danisurf, me hará un detallado resumen de lo acontecido hasta ahora, su lesión esquiando... surfeando, su convivencia con la decrépita abuela que ahora se encuentra en casa, su padre, su marihuana, su cambio de trabajo. Mañana fumaré y romperé e embrujo de éstas horas, no por voluntad sino por precariedad económica asumida. Volviendo a lo primero, no ha caído en saco roto la enseñanza, lo que he de hacer es consumir cuando me aporte, no consumir para amaestrarme o dormirme, he de hacerlo con sutileza y calma... como se hacen las cosas buenas. Por éso anuncio que seré selectivo en adelante con cada paso que de, me reuniré con Mariaclubbing y me dejaré llevar por las enseñanzas de una mujer con cuerda para rato, de una chica que tiene cabeza para andar desafiando la ley de la gravedad desde la experiencia y la razón, ay el irresistible encanto de los locos.... Insisto, desconozco qué hago aquí escuchando el continuado sonido del ventilador y oyendo el ruido de la barra espaciadora y demás teclas. Vivir para transmitir, en éso consistirá mi obsesión. Ant, un martes atípico.

1 comentario:

70kilos 257gramos dijo...

mamporrero.
(De mamporro).

1. m. Hombre que dirige el miembro del caballo en el acto de la generación.

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